La Corte Suprema decidió apoyar al gobierno de Donald Trump y volver a instalar la decisión de Kristi Noem, secretaria de Seguridad Nacional
El Estatus de Protección Temporal (TPS, en inglés) vuelve a estar en el centro de la política migratoria del presidente de Estados Unidos, Donald Trump. El republicano no se quedó de brazos cruzados con la decisión federal de un juez de California que, en marzo, protegió la validez del TPS antes de que inicie el juicio que enfrentará a los beneficiarios del programa con el gobierno de EEUU.
Las semanas de respiro y alivio terminaron este lunes 19 de mayo cuando la Corte Suprema de Estados Unidos decidió involucrarse en el asunto. El máximo ente legal del país determinó que la protección del juez Edward Chen no tenía lugar y, por ende, deja de nuevo el TPS sin protección. Es decir, la orden de Kristi Noem, secretaria de Seguridad Nacional de EEUU, es la acción que vuelve a estar vigente.
Esta medida afecta, principalmente, a casi 350.000 migrantes venezolanos que cuentan con el documento emitido en 2023, pero no a quienes tienen el de 2021 que vence en septiembre de este año.
El juicio por el tema del TPS, que apenas tendrá los primeros argumentos el próximo 15 de julio, enfrentará a los migrantes venezolanos con el gobierno de Estados Unidos. Sin embargo, la protección que buscaba mantener el estatus de los connacionales durante el juicio ya no tiene validez. Es decir, mientras se lleve a cabo esa batalla jurídica, cientos de miles de venezolanos no tendrán un estatus legal en el país.
“Seguiremos defendiendo los derechos de quienes tienen TPS hasta el último paso comprendido por la ley. Pero que nadie se equivoque, la decisión de hoy genera un daño devastador a cientos de miles de personas mientras la decisión se hace efectiva”, dijo Jessica Bansal, abogada de la Red Nacional de Organización de Jornaleros (Ndlon, en inglés).
Sin embargo, todavía hay más preguntas que respuestas sobre este y sobre los alcances de esta decisión.