Paleontólogos del Consejo de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina (Conicet) hallaron restos fósiles de un nuevo dinosaurio herbívoro gigante de cuello largo, que vivió en lo que actualmente es la provincia de Río Negro (sur) hace unos 90 millones de años, cuando transcurría el Cretácico Superior, el último de los períodos de la Era de los Dinosaurios, informó hoy jueves el organismo estatal.
La especie, la más grande descubierta en la provincia patagónica, fue bautizada como «Chucarosaurus diripienda», indicó el Conicet.
Los restos hallados, consistentes en distintos elementos de las extremidades de dos individuos diferentes, fueron descubiertos a unos 25 kilómetros al sur de la Villa El Chocón, en el marco de una campaña del equipo paleontológico del Laboratorio de Anatomía Comparada y Evolución de los Vertebrados del Museo Argentino de Ciencias Naturales «Bernardino Rivadavia», a cargo del investigador del Conicet Fernando Novas.
En esta localidad, ubicada a unos 1.230 kilómetros al suroeste de Buenos Aires (capital federal), se han hallado restos fósiles de otros dinosaurios, incluidos enormes carnívoros, además de otros de pequeño tamaño y restos de reptiles que vivían a la sombra de los dinosaurios como cocodrilos, tortugas y tuátaras.
Sin embargo, curiosamente, hasta el momento no se habían descubierto dinosaurios herbívoros, destacó el Conicet.
«Chucarosaurus es un titanosaurio perteneciente al grupo de los saurópodos colososaurios (Colossosauria). Por el tamaño de su fémur, unos dos metros de largo, estimamos que debía pesar entre 40 y 50 toneladas y tener unos 30 metros de largo. Esto lo convierte en la especie más grande hallada hasta el momento en la provincia de Río Negro», afirmó Matías Motta, becario doctoral del Conicet.
De acuerdo con Motta, sus 30 metros de largo equiparan al Chucarosaurus con otros dinosaurios herbívoros gigantes del Cretácico descubiertos en el sur del continente americano, como Argentinosaurus, Patagotitan o Notocolossus; también entre los más grandes del mundo.
Aunque se han descubierto dinosaurios más grandes que el Chucarosaurus, «la nueva especie rionegrina se suma al grupo de grandes dinosaurios herbívoros que dominaron los ecosistemas terrestres a fines del Cretácico», observó Motta.
Por su parte, Federico Agnolín, primer autor del trabajo e investigador del Conicet, resaltó que «los huesos conocidos del Chucarosaurus son notablemente más gráciles, lo que hace pensar que debía ser bastante más esbelto que otros gigantes».
La región patagónica es conocida por el recurrente descubrimiento de restos de dinosaurios herbívoros de gran tamaño. «Estos supergigantes parecen haber sido muy abundantes y exitosos en América del Sur y se los ha registrado en las provincias de Mendoza, Neuquén, Chubut, Santa Cruz y Río Negro», detalló la información oficial.
Chucarosaurus fue encontrado junto a una gran cantidad de restos vegetales, en rocas que indican la existencia de ríos caudalosos. En las cercanías al Chucarosaurus, los investigadores encontraron los restos del enorme dinosaurio depredador llamado Taurovenator. Todos estos hallazgos permiten a los paleontólogos conocer mejor cómo era el ecosistema del norte rionegrino hace unos 90 millones de años.
Los investigadores destacaron que, a fines del período Cretácico, la Patagonia era muy diferente a como se ve hoy en día. Lejos de las mesetas áridas con arbustos espinosos, en aquel entonces la región se encontraba cubierta por bosques de araucarias y una gran diversidad de vegetales. Y tenía un paisaje salpicado por lagos, lagunas y ríos que permitían prosperar a distintos tipos de animales.
Los restos de Chucarosaurus quedarán exhibidos en el Museo Provincial Carlos Ameghino, localizado en la ciudad de Cipolletti, provincia de Río Negro, unos 1.135 kilómetros al suroeste de Buenos Aires.