» Cuidar las palabras es cuidarse uno mismo»Pr. 13:3
Miguel Àngel Paz
¿Que son las palabras? Son la representación desde el punto de vista de la gramàtica, de la imagen oral por intermedio de unos sonidos llamados letras. Sin embargo en la palabra gramatical los lingüistas reconocen dos elementos: Primero, la expresión mediante sonidos particulares, de imágenes, ideas creadas por la actividad psíquica y en segundo lugar, la expresión mediante otros sonidos sensitivos de ciertas relaciones que el espíritu establece entre esas imágenes o pensamientos.
Por eso es necesario comprender que no hay que confundir las palabras con las ideas, debido que detrás de una palabra inocente se puede esconder una idea terrible y bajo una palabra terrible se puede esconder una idea inocente.
Las palabras sirven para expresar ideas, pero hay que previamente ponerse de acuerdo sobre el significado de cada palabra, es una etiqueta que se puede colocar sobre cualquier envase. En una farmacia, por ejemplo, lo importante es lo que hay dentro de los frascos o recipientes: imaginemos que un perturbado entra una noche en esa farmacia y se dedica a cambiar la etiqueta de los frascos: al día siguiente el farmacéutico podría ocasionar verdaderos estragos, dando veneno en lugar de purgantes.
Tomemos como ejemplo la palabra Revolución, tan de moda en Venezuela en los últimos dos decenios y medio de nuestro tiempo. Ella según la etimología en sentido limitado es la acción o efecto de cambiar violentamente las instituciones políticas de un Estado, generando una profunda conmoción. Históricamente se señalan solo cuatro, la primera que se produjo el año 1649 con la revolución inglesa que derribó la monarquía de los Estuardo, luego trascendió la Francesa en 1789 con la salida de Luis XV posteriormente la rusa entre 1917 y 1918 con la expulsión y asesinato de Alejandro II, último de los zares y la última en la isla de Cuba en enero de 1959 con el derrocamiento del gobierno militarista de Fulgencio Batista, quien huyó al exterior, de allí emergió una dictadura de corte totalitaria que se mantiene hasta hoy. Desde entonces se han producido intentonas en muchos países sin efectos trascendentes.
En sentido más amplio es una actuación organizada de sublevación que trasciende la esfera política y tiñe de contenido propio el conjunto de actividades de una sociedad .
Intentar endosar tal calificativo como el caso nuestro, que además se arribó al gobierno por vía electoral, no es más que una falsedad para jugar con la fantasía imaginaria y manipular la conciencia del país, se sintetiza cuando se abrogó la etiqueta de una inexistente V República para intentar borrar de un solo trazado las huellas de un sistema democràtico, perfectible, obtenido por la lucha unitaria de una clase política, cuyos resultados tuvo su fase triunfal a partir del 23 de enero 1958, combinando una insubordinación de acción militar con una descontenta poblada civil participando en masas, logrando revertir el orden impuesto arbitrariamente asumido coartando los cauces democráticos obtenidos en 1948. A pesar de la acción no pudo calificarse con el mote de revolución, mucho menos esta, repito, llegada por la vía electoral.
Cabe preguntarse ¿Como se implementó su contenido inicial? Primero se cambió el contenido conceptual Constitucional, señalando que estaba diseñada para una democracia participativa y protagónica, calificada su redacción como la de mayor valía universal, endosàndole luego el calificativo de «Bolivariana» para pretender asociarla al pensamiento libertario de Simón Bolívar, ( refiriendo como presunto éxito una aislada y fracasada intentona golpista exclusivamente militarista, 8 años antes), poco tiempo su texto, calificado pomposamente como orgullo «universal» ella en el 2007 fue derrotada electoralmente al intentar modificarla, en ese intermedio se habló de la política de tercera vía, propuesta para Inglaterra por el Primer Ministro laborista Tony Blair, quien proponía la búsqueda de una alternativa entre los conceptos antagónicos de socialismo y capitalismo para finalmente al concluir la primera década de mandato, proponer el sistema fallido de la implantación de un tipo de socialismo » sui géneris», suerte de minestrone, que pomposamente denominaron del Siglo XXI y con él la reafirmación de la instalación tergiversada y mentirosa del «proceso revolucionario», con predominio milico, llevando consigo la copia fiel de la ridículas y tràgicas consignas cubanas: » Patria, socialismo o muerte» y «venceremos» , luego agregarle después de la desaparición física del líder, la absurda afirmación resurrecta de «Chàvez Vive»
Comencemos su anàlisis: el llamado de profundización en la participación democrática, ella queda restringida cuando se ufanaban en garantizar libertad de expresión, así como un respetuoso debate político, defensora de intereses nacionales, garantía para la educación a todos los niveles, así como a la cultura, acceso a fuentes de trabajo, servicios médicos asistenciales, garantía en la administración de justicia, acceso a la alimentación y bienestar social de todos pero en realidad el tiempo, juez de la vida humana, se ha encargado en demostrar todo lo contrario, porque observamos que la verdadera esencia de las promesas incumplidas y acentuadas se evidencian cuando son cerradas y confiscados los equipos de radio, tv y periódicos, la aprobación de una ley mordaza que cercena la libertad de expresión y se persigue a periódistas;
con una calidad educativa a todos sus niveles semejante a la aplicada a países del tercer mundo sumando a ello el deterioro sistemático de sus infraestructuras al igual que el servicio precario de los centros hospitalarios; servicios públicos elementales colapsados; sistema judicial prostituido, cuerpos de seguridad infiltrados por delincuentes, persecusión, encarcelamiento y asesinatos a la disidencia política, incluyendo antiguos aliados, escàndalos de hechos administrativos de corrupción impunes, alto índice de desempleo, sueldos miserables, inflación del costo de la vida que genera crecimiento de los cinturones de miseria, todo contrastante con una clase política minoritaria que ostenta el poder político hoy llamados los» bolichicos». Una » revolución» cercenadora de derechos fundamentales, expropiadora de bienes privados, ocasionando un ambiente en ruinas sin producción industrial, agrícola y pecuario, en la que la delincuencia común al igual que la gubernamental crece cuantitativa y cualitativamente, en fin una «revolución» que favorece a una caterva dirigencial exclusiva y trafica con el destino del país.
Como puede observarse amigos lectores, las palabras no representan nada. ¿Que hay debajo de ellas? . Eso es lo que importa, su contenido, no las palabras. De tal manera que la definición política de marras no es màs que un simple rótulo. Toda una estrategia de oferta engañosa de inmoral explotación del término como despiadado provocador de odios y obnubilaciones de cobardías y bajezas de atropellos con arbitrariedades, acompañadas con el cebo sangriento escondido en su aguzado anzuelo, colgado del sedal de pesca. Afortunadamente la zafra està llegando al fin de sus días, ya que ha sido develada la ignominiosa intención de perpetuarse
Profesor Universitario, Ex parlamentario