Una nueva investigación ha identificado las formas en que «el bosque de un solo árbol», que cubre más de 430.000 metros cuadrados, parece estar fragmentándose.
Aunque la colonia de Pando, o el gigante temblón, en lo profundo de los bosques del centro de Utah, en Estados Unidos, parece una franja apretada de álamos, se considera en gran medida una planta gigantesca que tiene la distinción de ser el mayor ser vivo del mundo. Ahora, este organismo de 40.000 álamos temblones –el único que se cree que procede de la misma raíz– parece estar fragmentándose como resultado del sobrepastoreo.
En concreto, un nuevo estudio ha identificado las formas en que «el bosque de un solo árbol», que cubre más de 430.000 metros cuadrados, se está fracturando en individuos más pequeños
Pando: sistema de raíces compartido
La colonia de Pando se trata en realidad de un grupo de tallos genéticamente idénticos con un sistema de raíces compartido, y por tanto constituye un único organismo. Ahora, ciervos y el ganado, que mastican los nuevos brotes de los árboles, impiden que los árboles moribundos sean reemplazados. No obstante, esta amenaza parece ser más una consecuencia de la intervención humana.
«Para el ojo inexperto, parece que los ciervos y el ganado son los villanos aquí, pero ambas especies están muy manipuladas por los humanos», dijo a Vice Paul Rogers, ecólogo de la Universidad Estatal de Utah que publicó un estudio reciente sobre el Pando en desintegración.