El texto de cierre de la cumbre del G7 en Italia no incluye ninguna referencia directa al derecho al aborto, una mención a la que Italia, que ejerce la presidencia temporal del grupo, se oponía.

Los líderes del G7, las siete democracias más avanzadas del mundo, evitaron usar la palabra «aborto” en la declaración final de su cumbre en Italia presentada este viernes, tras las divisiones surgidas entre ellos, sobre todo debido a la oposición de Italia, país que ejerce la presidencia temporal del grupo. Sin embargo, se comprometieron a defenderlo.

Estados Unidos, Francia y la Unión Europea querían mantener la misma redacción que la de la declaración final de la cumbre del G7 en Hiroshima (Japón) de 2023, donde se garantizaba «el acceso al aborto seguro y legal y la atención posterior al aborto”. Sin embargo, finalmente desistieron por falta de acuerdo con la jefa del gobierno italiano, Giorgia Meloni.

«Estábamos defendiendo lo acordado en Hiroshima, donde el texto era más explícito, pero no fue posible encontrar un acuerdo», explicó un alto funcionario de la Unión Europea. «Lo importante es que en el texto tengamos la promoción de los derechos sexuales y reproductivos», agregó. Los debates fueron intensos, en particular entre el presidente francés Emmanuel Macron y Meloni.

El choque Macron-Meloni

Finalmente, al acuerdo alcanzado por los siete países fue el siguiente: «Reiteramos nuestros compromisos con el ‘Comunicado de Líderes de Hiroshima’ por un acceso universal a servicios de salud adecuados, asequibles y de calidad para las mujeres, incluida la salud y los derechos sexuales y reproductivos integrales para todos».

La cuestión ha ciertamente enturbiado el desarrollo del foro. Macron, que ha incluido el derecho al aborto en la Constitución gala, lamentó ante los periodistas que la palabra en cuestión hubiera desaparecido de la declaración. La anfitriona respondió irritada acusándole de hacer «campaña electoral», por su decisión de adelantar elecciones legislativas tras su derrota en las elecciones europeas, en el lugar menos oportuno, donde se discuten los grandes temas de la geopolítica.

«No hay razón para discutir sobre temas en los que hemos estado de acuerdo durante mucho tiempo. Y creo que es profundamente erróneo, en tiempos difíciles como estos, hacer campaña utilizando un foro tan valioso como el G7», recriminó la política italiana.

DZC (AFP, EFE)