Miles de palestinos huyeron el viernes del norte de la Franja de Gaza, después de que Israel los emplazara a evacuar la zona antes de una posible invasión del enclave, en una escalada bélica que amenaza con convertirse, según la ONU, en una «catástrofe humanitaria».
La orden de evacuación precipitó a miles de habitantes del norte de la Franja a huir en coche o a pie hacia el sur, aunque sin esperanzas de salir del enclave por el lado israelí ni por su único paso con Egipto, poco deseoso de tener que vérselas con una crisis de refugiados.
La población de Gaza se está quedando además sin agua, electricidad ni comida, debido al «asedio total» impuesto por Israel tras el ataque terrorista de Hamás. Muchos habitantes de Gaza se niegan así y todo a partir.
El exilio es una cuestión dolorosa en el enclave, donde más del 80% de sus habitantes son refugiados o descendientes de refugiados que abandonaron sus pueblos y ciudades o fueron expulsados de ellos cuando se creó Israel en 1948. (afp)