Omar Avila, Diputado a la Asamblea Nacional, señaló este viernes que luego de cincuenta y seis aumentos de salario, una industria petrolera que apenas produce el veinte por ciento y la mayoría de la población ganando el noventa por ciento menos, ambas cifras con respecto a 1998, “son una prueba irrefutable del desastre económico que tiene entrampado al gobierno nacional, producto de lo mal que ha manejado la política económica en lo que va del siglo XXI”.
Explicó que estos aumentos a lo largo de más de dos décadas sólo han sido correcciones salariales con las que se habría intentado de recuperar parte del poder adquisitivo perdido, sin que eso se traduzca en una mejora del ingreso real para los venezolanos, “con el agravante de que el Producto Interno Bruto (PIB) se asemeja al de finales de la época de los años 50”.
“Ningún trabajador sea del sector público o privado, gana lo suficiente para cubrir al menos sus necesidades básicas, razón por la cual, desde Unidad Visión Venezuela, no solo entendemos, sino que acompañamos al ciudadano en su legítimo derecho en sus demandas por tener un salario que le satisfaga y permita dedicar recursos al sano entretenimiento, e incluso poder ahorrar para el futuro”, subrayó.
Recordó que durante la bonanza petrolera en la década pasada se cometieron un sin número de errores, uno de ellos fue el aumento de la nómina de una forma que no fue sostenible en términos de brindar calidad de vida a los empleados. “Dos décadas después tenemos unos ingresos reducidos y la imposibilidad de cubrir Canasta Básica mientras que la llamada Canasta de supervivencia semanal, se ubica alrededor de 22.16 dólares en el país”.
Por otra parte, el parlamentario aseguró que el debate económico es una materia pendiente que está reprobada, hecho dificulta de antemano la concertación de posibles soluciones dentro de la esfera pública. “Lamentablemente, el gobierno nacional decide autocrática y unilateralmente las políticas energéticas y económicas del país que mantiene en el limbo a más de 28 millones de personas”.
Destacó que las políticas económicas propuestas desde su organización, Unidad Visión Venezuela, se han enfocado en promover el esfuerzo coordinado por parte del gobierno, el sector privado, la sociedad civil y la asistencia financiera internacional. “Al margen de cualquier resultado electoral, la reconstrucción económica del país requerirá décadas, lo que involucra la participación de varios mandatarios comprometidos y obligados a cumplir las metas de desarrollo y crecimiento. Una razón más para promover desde todos los espacios cuanto antes el debate económico”.
“Urge trabajar conjuntamente en un paquete de medidas que devuelva la confianza de los inversionistas extranjeros que tanto necesitamos en este momento”, finalizó.