«No podemos mirar a un lado, cuando más de siete millones de venezolanos han abandonado sus hogares pidiendo refugio»
La VII Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), aunque se celebra a puerta cerrada, permitió a los presidentes de Chile y Paraguay, Gabriel Boric y Mario Abdo Benítez referirse a la crisis política venezolana.
El mandatario chileno pidió que en el país se celebren «elecciones libres, justas y transparentes» en el año 2024. Además, ofreció a su gobierno como mediador para «colaborar en el dialogo entre los distintos sectores del país para encontrar una salida» a la crisis.
«La democracia se debe respetar especialmente en elecciones libres cuando gana aquel con quien no estoy de acuerdo y los derechos humanos son avances civilizatorios que deben ser respetados», insistió Boric, que también recordó las lecciones que dejó la dictadura de Augusto Pinochet en su país.
AbdoBenítez, de Paraguay, que ha sido uno de los más críticos con la gestión chavista, habló de la crisis migratoria por los flujos de venezolanos que han llegado a los demás países de Suramérica en los últimos años.
«No podemos mirar a un lado, cuando más de siete millones de venezolanos han abandonado sus hogares pidiendo refugio», recordó al citar cifras de las agencias de migración de la ONU.